El martes 1 de agosto, el arzobispo llegó al centro misionero de Veracruz, Ixcán, para presidir la celebración del decanato de Ixcán, El Quiché.

Participaron los presbíteros y representantes de las comunidades de Ixcán de El Quiché, pero, en esta ocasión, también de la parroquia de Ixcán de Santa Cruz Barillas.

Después de la formación que impartió el arzobispo, se abrió un tiempo de diálogo acerca del contenido de la formación y de otros temas de interés.

Se subrayó la importancia de que, junto a la formación, se dé la oportunidad de que los fieles sigan profundizando en la temática estudiada.

Los coordinadores de las parroquias Efusión del Espíritu Santo de Ixcán, como de la parroquia Santísima Trinidad de Barillas, rindieron informe pastoral.

También el padre José Armando y el padre Rovinson, presentaron la situación de sus respectivas parroquias.

Seguidamente, se dio inicio a las celebracione slitúrgicas, con la administración del sacramento de la reconciliación para los participantes en el decanato.

El arzobispo animó a reconocerse pecadores y luego administró la absolución, después de invocar la efusión del Espíritu Santo.

Durante la homilía, el arzobispo señaló cuáles son las características de quien, como discípulos del Señor, quiere vivir dentro del Reino de Dios.

Por los mismo, invitó a los hermanos a entrar en oración, para implorar el don de poder ser auténticos discípulos del Señor continuamente.

Con ocasión de las celebraciones litúrgicas, se hizo la bendición de los lectores para las parroquias involucradas en el decanato de Ixcán, El Quiché.

El arzobispo, previamente, recordó que para ejercer el ministerio con autenticidad, es necesario que se reciba a la Palabra viva de Dios, especialmente a través de la eucaristía.

También se hizo la bendición de los catequistas de las parroquias que participaron en el decanato de Ixcán.

El arzobispo recordó que el Espíritu Santo es el único maestro que se tiene, pero el catequista tiene como misión preparar su llegada en la vida de quienes son catequizados.

Un numeroso grupo de niños y jóvenes de las parroquias participantes en el decanto, fueron bendecidos para ejercer el servicio del altar como acólitos.

Antes de la bendición, fueron exhortados por el arzobispo a tratar de ser fieles y de perseverar en la vida cristiana.

También los integrantes de los ministerios de música fueron invitados para que se orara por ellos y se les bendijera.

Fueron muchos los hermanos que acudieron a la invitación, con cuya bendición se busca que quienes participen en los ministerios de música, asuman realmente una actitud de conversión continua.

La actividad en el Centro Misionero de Veracruz culminó con la celebración de la divina liturgia.

La misma fue presidida por el arzobispo y concelebrada por los padres José Armando, Rovinson y Jesús.

El mismo día 1 de agosto, por la tarde, el arzobispo, acompañado por los padres Rovinson y Jesús, llegó hasta la sede parroquial de Pueblo Nuevo, Ixcán.

La visita comenzó con la administración del sacramento de la reconciliación a los participantes en la celebración litúrgica.

Después de la homilía, el arzobispo invitó a los hermanos a implorar del Señor la gracia de poder ser auténticos discípulos, para recibir el Reino de Dios.

Los hermanos oraron con intensidad, expresando su disponibilidad de cumplir la voluntad divina.

Con ocasión de la visita del arzobispo a Pueblo, Nuevo, fueron preparados quince hermanos para recibir la confirmación de la crismación y el envío misionero.

El arzobispo exhortó a los confirmandos a cumplir con seriedad y fidelidad la misión de ser misioneros y testigos del Evangelio.

La visita a la comunidad parroquial de Pueblo Nuevo culminó con la celebración de la divina liturgia.

La celebración fue presidida por el arzobispo y concelebrada por los padres Jesús y Rovinson.

El mismo día marte 1 de agosto, por la noche, en el Centro Misionero de Tomten, de Cobán, el arzobispo presidió la celebración del decanato presbiteral del sur de Alta Verapaz.

Los forman los padres Fredy González, Alexander Mendoza, Gustavo Pineda, Damián Romeron y Sergio Chamán. Fueron elegidos como decanto el padre Fredy, vice-decanto el padre Alexander y secretario el padre Sergio.

El martes 2 de agosto, por la mañana, en el Centro Misionero de Tomten, Cobán, Alta Verapaz, el arzobispo presidió el decanato del sur de Alta Verapaz.

Se contó con la participación de hermanos de todas las parroquias y centros pastorales involucrados, así como de los presbíteros: padres Fredy, Alexander, Gustavo, Sergio y Damián.

Después de la formación que impartió el arzobispo, los coordinadores de los consejos pastorales presentaron el informe de la marca de las comunidades.

En este decanato participan las parroquias de Cojaj, Balbatzul, Lanquín, Chamá Grande y Chitania y los centros pastorales de Senahú, Rocah Pasacuc, Cahabón y Tomten/Tactic.

El mismo día, miércoles 2 de agosto, el arzobispo presidió la administración del sacramento de la reconciliación para los participantes en el decanato.

Se exhortó a reconocerse pecadores y, seguidamente, se invocó el Espíritu Santo para el perdón de los pecados.

Dentro del marco de las celebraciones litúrgicas, se invitó a los lectores presentes, para impartirles la bendición que los capacita para el ejercicio de ese ministerio.

El arzobispo explicó la urgencia de ser capaces de acoger la Palabra de Dios viva en los corazones, para ser testigos en el ejercicio del ministerio.

También, en el contexto de las celebraciones en el decanto del sur de Alta Verapaz, se hizo la bendición de los catequistas que ejercen ese ministerio en el área.

El arzobispo recordó que el único maestro es el Espíritu Santo y que el catequista tiene la misión de preparar el camino para su llegada en la vida de los catequizandos.

También fueron bendecidos los acólitos de algunas de las parroquias y centros pastorales del decanato del sur de Alta Verapaz.

Debido a dificultades de diversa índole, solamente pudo participar un número reducido de la totalidad de acólitos que ejercen el ministerio en las diversas comunidades.

En el decanato anterior se realizó la bendición de ministros de distribución de la comunión. Sin embargo, un pequeño número no pudo hacer la renovación. Por tal razón, en esta ocasión de bendijo a tres ministros.

Además algunos hermanos que ejercen el ministerio de intercesión, también fueron bendecidos.

La actividad culminó con la celebración de la divina liturgia, la cual fue presidida por el arzobispo.

Concelebraron los cinco presbíteros que ejercen el ministerio en esta zona: Padres Fredy González, Gustavo Pineda, Alexander Mendoza, Damián Romero y Sergio Chamán.

El jueves 10 de agosto, por la mañana el arzobispo llegó hasta Santo Domingo las Flores del Municipio de La Libertad, Huhuetenango, para presidir el decanato del sur occidente de Huehuetenango.

En el mismo están involucrados los Centros Pastorales de La Libertad y de la Democracia, así como el de Amatenango de la Frontera de Chiapas, México.

Después de la formación impartida por el arzobispo, los hermanos tuvieron la oportunidad de plantear algunas preguntas y hacer diversas reflexiones.

En general, se hizo énfasis en la urgencia de ser formados y de vivir en constante actitud de conversión.

Los coordinadores de los Centros Pastorales así como los presbíteros que ejercen el ministerio en el decanato presentaron el informe pastoral de los Centros.

Los presbíteros participanrtes fueron los Padres Francisco Pastrana de la Libertad, Antonio Castro de la Democracia y José Alfredo Hernández de Amatenango.

La actividad litúrgica con los participantes en el decanato dio inicio con la administración del sacramento de la reconciliación.

El arzobispo recordó que la llave que abre para alcanzar la misericordia de Dios y la unción con el Espíritu Santo es el reconocerse pecadores y recibir la absolución.

A la luz de la homilía, en la que el arzobispo animó a los hermanos a descubrir los dones que Dios da a cada quien para la edificación de la Iglesia, invitó a la oración.

Cada uno oró por si mismo y su propia conversión, así como por los centros pastorales.

Dentro del marco de las celebraciones litúrgicas fueron presentados los hermanos Elías y Evely, nietos del hermano Juan Carrillo, fundador de la comunidad de Santo Domingo las Flores, para ser confirmados en la crismación y recibir el envío misionero.

El arzobispo recordó los compromisos que se asumen y administró la unción correspondiente.

También participó en la liturgia la mayoría de los lectores de los centros pastorales que participan en el decanato del sur-occidente de Huehuetenango.

Después de recordarles las características del ministerio que se confía, el arzobispo les bendijo.

También algunos de los catequistas y predicadores de los centros pastorales del decanato del sur occidente de Huehuetenango fueron bendecidos para el ejercicio de su ministerio.

El arzobispo les recordó que es urgente que tengan conciencia que el único maestro es el mismo Espíritu Santo.

Un ministro para la comunión de Cantón Norte de la Democracia y una ministra para el Aguacatillo de Amatenango de la Frontera, Chiapas, fueron bendecidos.

El arzobispo les recordó el sentido y los requerimientos de su ministerio y los bendijo.

Las celebraciones culminaron con la celebración de la divina liturgia presidida por el arzobispo.

Concelebraron los tres presbíteros involucrados en el decanato del sur occidente de Huehuetenanto y los fieles participaron con mucha devoción, habiendo, en su casi totalidad, recibido los divinos misterios.