El martes 18 de abril, por la noche, se llevó a cabo el encuentro del equipo de oración de la Parroquia San Miguel Arcángel, East Rancho Domínguez, Compton, California.

Se inició administrando el sacramento de la reconciliación a los participantes, después de que estos se confesaran pecadores.

Después de la homilía, en la que el arzobispo explicó el sentido en el que se crea la unidad y el compartir fraterno en la primera comunidad cristiana, se invitó a la oración.

Se oró especialmente por las necesidades y la conversión de los fieles de la parroquia y de las comunidades, así como por su crecimiento.

La actividad con el equipo de oración, concluyó con la divina liturgia presidida por el arzobispo.

Todos participaron con sincera devoción y con la confianza de que a través del sacramento se actualiza la Iglesia y se comunica el Espíritu Santo.

El miércoles 19 de abril, por la noche, el arzobispo llegó hasta la sede de la comunidad Poder del Espíritu Santo, ubicada en el centro de Los Ángeles, California.

La visita comenzó con la administración del sacramento de la reconciliación a los hermanos que se confesaron pecadores.

Durante la homilía, a la luz de las lecturas sobre el misterio de la resurrección, el arzobispo recordó que la fe en la resurrección lleva a reconocer la presencia viva del Señor resucitado, especialmente en el sacramento.

Por lo mismo, invitó a los hermanos a orar, para tener la actitud necesaria, de manera que el Señor resucitado se manifieste en la vida de cada creyente.

La visita concluyó con la celebración de la divina liturgia, presidida por el arzobispo.

Los hermanos acudieron en gran número a recibir la comunión sacramental, para recibir al Señor resucitado en sus vidas.

El mismo miércoles 19 de abril, por la noche, el arzobispo visitó la comunidad Pacto Divino, igualmente ubicada en el centro de Los Ángeles, California.

Los hermanos estaban llenos de gozo, animados por el canto y la oración y, al llegar el arzoispo, les administró el sacramento de la reconciliación.

En el marco de la celebración litúrgica, el arzobispo invitó a los hermanos a consagrarse al Señor y entregarse incondicionalmente, para reconocer al Señor resucitado en sus vidas.

Los hermanos oraron con humildad y fe, tanto por los miembros de la comunidad como por sus familiares y por toda la parroquia.

La visita a la comunidad Pacto Divino concluyó con la celebración de la divina liturgia, presidida por el arzobispo.

Los hermanos, llenos de fe y devoción participaron en la celebración y, muchos de ellos también comulgaron con los divinos misterios.

El jueves 20 de abril, por la noche, el arzobispo llegó hasta la Comunidd de El Pescador, ubicada en el Centro Sur de Los Ángeles.

Después de saludar a los hermanos, el arzobispo administró el sacramento de la reconciliación a todos los que, con corazón humilde y arrepentido se confesarion pecador.

Después de la homilía, en la que el arzobispo explicó el sentido de la fe en la resurrección del Señor, invitó a los hermanos a que se pusieran en oración.

Se trataba e clamar para que se asumieran las actitudes necesarias, para que el Señor resucitado se mantenga presente en la vida persona de cada uno de los creyentes.

La visita a la comunidad El Pescador culminó con la celebración de la divina liturgia, presidida por el arzobispo.

Los hermanos participaron con devoción, a pesar del pequeño número que logró participar y, la casi totalidad, se acerco a recibir los divinos misterios.

El viernes 21 de abril, por la noche, en la sede de la parroquia San Miguel Arcángel de East Rancho Domínguez, Los Ángeles, el arzobispo presidió el encuentro con los catequistas de la parroquia.

Se inició administrando el sacramento de la reconciliación, después de haber hecho cada uno, el reconocimiento de ser pecador.

Durante la homilía, el arzobispo animó a los hermanos a hacer discernimiento personal acerca de los frutos que se están dando, en todos los niveles de la vida.

A la luz de la reflexión, invitó a los hermanos a entrar en oración, para pedir del Señor la capacidad de conocer su voluntad, para poder acogerla y dar los frutos que se esperan.

Seguidamente, el arzobispo explicó que la enfermedad tiene connotaciones físicas, pero su origen están también en el debilitamiento espiritual que se vive.

Por lo mismo, se administró el sacramento de la unción de los enfermos a quienes, reconociendo su fragilidad y debiidades, quisieron recibir la fortaleza del Espíritu Santo.

El viernes 21, por la noche, el arzobispo presidió la celebración de la divina liturgia para catequistas de la parroquia de San Miguel Arcángel, en la sede parroquial.

Los hermanos participaron con mucha devoción y, en su totalidad, se acercaron a comulgar con los divinos misterios.

Durante el tiempo de formación para los catequistas, el arzobispo explicó el sentido que tiene, cuando en la Sagrada Escritura se habla de que la Palabra de Dios se hizo carne.

También explicó por qué es que cuando se comulga con la Palabra de Dios hecha carne, se recibe, efectivamente, la vida eterna. E invitó a que se cambie la mentalidad y el lenguaje que, erróneamente se utiliza.

Finalmente, se celebró la reunión mensual del arzobispo con el consejo pastoral de la parroquia. Se expusieron las diferentes situaciones que se viven.

El arzobispo invitó a que se preparen las listas de quienes participarán en la predicación y en los demás ministerios y a que se inicien proceso de formación para los diferentes ministerios.

El sábado 22 de abril, por la tarde, en la sede de la parroquia San Miguel Arcángel, East Rancho Domínguez, Los Ángeles, California, se llevaron a cabo las actividades de la Escuela de Teología y Formación Ministerial Santiago Baradeo.

Se comenzó con la presentación hecha por los alumnos acerca de la formación impartida en la sesión precedente.

El arzobispo impartió la formación preparada para los alumnos de la Escuela de Teología y Formación Ministerial Santiago Baradeo.

En esta ocasión, se abordó la cuestión del Segundo Concilio de Constantinopla y el surgimiento definitivo de la Ortodoxia, que hoy se conoce como Ortodoxia Oriental.

Al final de la formación, los alumnos plantearon una serie de preguntas sobre diferentes cuestiones, especialmente relacionadas con las implicaciones de la Ortodoxia.

El arzobispo enfatizó que no se trata de una Iglesia diferentes sino de la forma como se vive la Iglesua una, santa católica y apostólica.

El sábado 22 de abril, hacia el caer del día, en la sede de la Parroquia San Miguel Arcángel, el arzobispo impartió formación para los fieles de la parroquia.

En esta ocasión se abordó la cuestión del sentido de la renovación auténtica y del ser carismático.

Seguidamente, comenzó la celebración de la liturgia sabatina en la sede de la parroquia San Miguel Arcángel.

Se inició con la administración del sacramento de la reconciliación a todos los que se confesaron pecadores y se sintieron necesitados del sacramento.

Durante la homilía, el arzobispo explicó el sentido ministerial de la Iglesia que el Señor fundó y animó a los hermanos a ponerse en oración, para reconocer los carismas que el Señor da a cada quien.

También invitó a orar por discernir la voluntad de Dios sobre la vida de cada quien, de manera que se le deje subir a la barca de cada quien.

Finalmente, la actividad litúrgica concluyó con la celebración de la divina liturgia, presidida por el arzobispo.

Los hermanos participaron devotamente y, numerosos acudieron a recibir la comunión sacramental.

El mismo sábado 22 de abril, entrada la noche, el arzobispo se dirigió a la comunidad El Pescador, que estaba celebrando su décimo sexto aniversario.

La actividad litúrgica inición con la administración del sacramento de la reconciliación a todos los participantes.

Después de la homilía, el arzobispo invitó a los hermanos a entrar en oración para dar gracias al Señor por las bendiciones recibidas.

Se hizo un recordatorio especial del hermano León Velásquez, fundador de la comunidad y quien murió a causa del Covd 19.

También fue presentada una hermana de la comunidad, para ser bendecida como lectora.

Después de hacer las exhortaciones correspondientes, el arzobispo procedió a bendecirla.

La actividad del arzobispo en la comunidad El Pescador culminó con la celebración de la divina liturgia.

Los hermanos participaron con fe y devoción, conscientes de qu econstituye el centro de la vida de fe y el medio para acoger la Palabra de Dios hecha carne.